Entrevistas con nuestros socios: Escuela del Mar

Tanto mi mujer como yo venimos de un mundo en el que no teníamos nada que ver con la náutica. Ella es médico cirujana y yo me dedicaba a temas de márqueting y comerciales en Madrid. Hubo un momento en el que nos replanteamos nuestra vida, como mucha otra gente que está bloqueada en su actividad normal. Buscamos otras posibilidades al margen de lo que ya veníamos haciendo. Entonces nosotros nos replanteamos nuestra vida, nos compramos un barco, estuvimos año y medio navegando y viviendo en él y a partir de ahí, una vez que acabó ese período y ya habíamos adquirido los conocimientos suficientes para sentirnos seguros en el mundo de la náutica abrimos una escuela.

La fundamos en 2001. Hemos ido creciendo y en estos momentos creo que somos los más grandes. Para diversificar nuestra actividad hemos creado dos franquicias; una en Sant Llorenç y la otra en Pollença. Esto ha sido un mercado creciente desde que abrimos, especialmente el mundo de la náutica, pero también han crecido todas las actividades de ocio en España en estos últimos años. 

Ahora con la crisis hemos notado este año una bajada que antes no habíamos sufrido. Esto lo interpreto de la siguiente manera: el mercado ha bajado (no nosotros), pero no se ha notado tanto a nivel de titulaciones. Hay mucha gente que piensa que la actividad de la náutica es una opción por si se quedan en paro o quieren cambiar de la actividad, como segunda opción. Yo diría que entre un 15% y un 20% de nuestros alumnos que se han matriculado para tener más conocimientos de la náutica y si en algún momento de perder el trabajo o de querer cambiar de actividad por las razones que sean ya tendrán unos conocimientos que los podrán explotar como crean más conveniente.

Pues así de memoria te puedo decir que alrededor de 5.500 alumnos.

Ofrecemos titulaciones deportivas. Pero también hemos diversificado la actividad hacia cursos subvencionados a través de la CAEB y del Govern. También ofrecemos cursos a profesionales, y ahí podemos encontrar los certificados profesionales y el patrón profesional de recreo. Ese es un poco el elemento diferenciador respecto a otras escuelas que solamente hacen cursos deportivos. En nuestra página web se puede encontrar la oferta completa de formación.

Yo siempre he estado a favor del asociacionismo. Pienso que las empresas nos tenemos que asociar para conseguir cosas para nuestro sector. Son todo ventajas el formar parte de una asociación. Por otra parte, es como un poco raro que una escuela esté dentro de una asociación como AENB, de hecho somos dos escuelas que estamos dentro. Pero nos conviene por la información que recibimos sobre la legislación, las novedades que hay dentro del sector e incluso por las relaciones que se establecen dentro mismo de la asociación entre los mismos asociados. Nos interesa mucho saber lo que opinan los distribuidores de barcos, porque al final mi actividad, aunque parezca lejana a la del vendedor de barcos, están muy relacionadas. Sus problemas pueden llegar a afectarnos. También de las relaciones con otros socios han salido relaciones comerciales, hemos dado algunos cursos para los empleados de empresas de náutica