08/03/2011
Galardón 2011 'Trayectoria Profesional': Hermanos Martínez Suau (Dibapol S.L.)
"Un barco es algo que puede tener todo el mundo a un cierto nivel. Es igual que los coches".
Los hermanos Martínez Suau son la segunda generación de empresarios náuticos que se hacen cargo con éxito de Dibapol S.L. No es de extrañar que tengan éxito en su vida profesional, ya que como dice Mª Luisa Martínez Suau, nuestro proyecto de futuro es “crecer todo lo que podamos, vender todo lo que podamos y conseguir toda la innovación técnica que se pueda conseguir”. Una ambición y una filosofía que les ha hecho merecedores del galardón anual de la AENB a la Empresa Asociada con la Trayectoria Profesional más Destacada.
Pregunta: Premio al asociado con una trayectoria profesional más destacada. No es poca cosa...
Repuesta: No (risas). Es un premio muy agradecido porque se valora el trabajo que estamos haciendo desde hace mucho tiempo. Es muy agradable recibir este premio.
P: Dibapol se fundó en 1968. Deben de haber cambiado muchas cosas en estos 43 años.
Muchas. Empezó mi padre con un astillero. Construía embarcaciones de madera. Cuando empezó la fibra de vidrio y la resina a sustituir la función de la madera decidió distribuir esos productos. Poco a poco después ya fuimos cogiendo un poco lo que eran recambios, accesorios... todo lo que rodeaba al mundo de la náutica. Con el tiempo los tres hermanos que somos fuimos cogiendo diferentes secciones de la empresa, luego el proceso normal de ir creciendo e ir buscando nuevos productos que vender. Más tarde compramos otra empresa, y en estos momentos también distribuimos barcos, distribuimos tres marcas de motores intraborda, distribuimos motores fueraborda y seguimos intentando vender resina y fibra de vidrios que es la base de la empresa. Lo que pasa es que astilleros en Mallorca hay muy pocos. Hacemos reparaciones, se necesita tener resina y fibra de vidrio para poder reparar un golpe o un agujero en un casco pero... ya no es el movimiento que tenía en un principio.
P: ¿Cómo fueron aquellos primeros años en los que usted y sus hermanos empezaron a trabajar?
Pues uno repartía, el otro iba a cobrar, el otro se dedicaba a ver si conseguía montar algún programa de informática que ayudara, porque facturábamos a mano, con una máquina. Los albaranes se hacían a mano. Era distinto, era muy manual el trabajo. Pero era muy divertido. Yo repartía con la furgoneta, con el camión... me iba a los astilleros a llevar los bidones de 200 kilos de resina. No se... era muy divertido. Mis hermanos después ya se sacaron el carnet de conducir y empezaron a repartir y yo me puse a cobrar y fuimos cambiando un poco los trabajos. De hecho, todos hemos hecho de todo en la empresa. Trabajamos más de 20 años con mi padre. Cuando él se jubiló, hará 15 años, nosotros nos hicimos cargo de la empresa y empezamos a contratar personas. En estos momentos tenemos 14 empleados.
P: Al ser una empresa familiar me imagino que el tema de compaginar vida familiar y laboral debe ser bastante agradecido...
Es agradecido. Es muy cómodo la confianza de poder decir que no vas al trabajo porque no te encuentras bien. Pero también te llevas los problemas a casa. Y cuando estás cenando, también cenas con los problemas. Supongo que le pasa a todo el mundo. La verdad es que nosotros siempre hemos estado juntos y siempre nos hemos llevado muy bien los tres hermanos.
P: A estas alturas aún hay gente que cree que la náutica es una cosa de ricos. ¿Usted que cree?
No, no es una cosa de ricos. Es una cosa que puede tener todo el mundo a un cierto nivel. Es igual que los coches. Cualquiera puede tener un coche pero no todos pueden tener un Porsche. En barcos lo mismo. Hasta hay gente que tiene un barco a medias con un amigo.
P: ¿Cómo es su cliente medio?
No hay uno en concreto. Tenemos los talleres, que son los que nos compran todos los recambios para trabajar con sus clientes. Particulares que arreglan un agujero en un casco o que pintan una patente. También el que arregla un motor... cualquier cosa de estas. Hasta el que viene a comprar el barco. Y también hay clientes de un nivel muy alto que nos compran barcos muy grandes. Nosotros vendemos barcos desde 2 metros, neumáticas pequeñitas, hasta barcos de 15m.
P: ¿Cuales cree que son las principales carencias de Baleares a nivel sector náutico?
Las facilidades, los amarres, los impuestos... sobretodo facilidades. Siempre me ha dado mucha envidia América en el sentido que tienen mucho espacio. Pueden montar una nave de 10.000 metros y meten 500 barcos allí dentro para hacer el invernaje. Y lo que es el coste del suelo no es caro. Aquí no puedes montar una nave de 10.000 metros porque se te tira encima la administración, se te tira encima el vecino y se te tira encima todo el mundo y no puedes ampliar. Además, al ser una isla no hay espacio suficiente. Y luego el gobierno quiere tenerlo todo demasiado controlado.
P: ¿Cuál es el ámbito geográfico en el que actúa Dibapol?
Baleares. Tenemos distribuidores que son clientes nuestros que nos compran a nosotros.
P: ¿Algún proyecto destacable de futuro?
Crecer todo lo que podamos, vender todo lo que podamos y conseguir toda la innovación técnica que se pueda conseguir. Lo más moderno que hemos conseguido últimamente ha sido el joystick para los barcos. Facilita mucho las cosas cuando estás atracando o amarrando el barco. No hace falta maniobrar tanto. Esto haría que pudiera haber más amarres, no haría falta que hubiese tanto espacio entre un pantalán y el otro. Pero claro, deberían llevarlo todos los barcos.
P: ¿Por qué decidieron asociarse a la AENB?
Siempre hemos pensado que las asociaciones ayudan a mover un poco el mundo. En el sentido de que si son muchos los que piden una cosa, el gobierno hace un poco más de caso. Si es uno sólo no tiene donde apoyarse ni donde ayudar. Creemos firmemente que las asociaciones sirven para eso.
P: ¿Qué ventajas le ha supuesto formar parte de AENB?
Poder aprovechar los cursos que dan, aprovechar las reuniones para conocer la opinión de los demás socios, utilizar la página web que son muy interesante las noticias que se publican en ella y sobretodo que la asociación solicite cosas para el sector.