Galardón 2017 al "Socio más antiguo": Náutica Martín

Este año Náutica Martín recibe el galardón al Socio más antiguo. Xisco Llabrés es un empresario de los de toda la vida, un histórico del sector. Y no es para menos. Lleva más de 40 años trabajando en Cala d’Or para dar a sus clientes el mejor servicio posible. Un amor por su trabajo al que se suma el compromiso con esta asociación, de la que es miembro desde 1998.

 

¿Cómo valoras este reconocimiento?

Pues muy positivamente. Al principio dudé de si aceptarlo, porque no me gusta que me den premios sólo por hacer mi trabajo, pero entiendo que también tiene una gran importancia para la asociación. En este sentido, quiero mencionar que Juan Rosselló fue el "culpable" de que me uniera en un principio a la asociación.

 

¿Cómo fueron tus inicios profesionales en el mundo de la náutica?

Pues fueron en Cala d'Or. Yo debía tener 18 años cuando monté con un socio otra empresa, la cual por ciertas circunstancias me la acabé quedando toda yo y al final tuve que traspasarla. De ahí a lo que hoy en día sigue siendo Náutica Martín. Y se llama Martín por mi padre, quien por aquel entonces tenía una empresa de taxis y otra de rent a car, todas con el nombre de Martín. Llevo casi 45 años trabajando profesionalmente en la náutica.

 

¿Cómo era el negocio cuando tú empezaste, allá por Cala d'Or?

Era muy pequeño aquello. Lo empezamos justo cuando el puerto de Cala d'Or se hizo realidad y el turismo empezó a tener un volumen importante. Al principio empezamos con accesorios y cosas básicas y ahora vendemos Yamaha también neumáticas. Los clientes que teníamos eran sobretodo extranjeros y turistas, también españoles. Y desde entonces la zona no ha hecho más que crecer. Otro de los servicios que ofrecíamos era la custodia. Como antes se vendían bastantes barcas los clientes tenían problemas en invierno para guardarlas y nosotros les ofrecíamos esa facilidad. Cuando se jubiló el mecánico que tenía, decidí que prefería simplificar y ahora unicamente me dedico a la venta.

 

Y desde aquellos inicios, ¿cómo ha cambiado?

Ahora hay mucho barco grande, y también muchas empresas que se dedican al mantenimiento y a la reparación, muchas de ellas clientes míos. Siempre procuro solucionarles los problemas y muchos acuden a mí cuando necesitan algo en particular. Supongo que gracias a todos los años que llevo trabajando en el sector me he labrado cierta reputación, y cuando he de comprar a proveedores piezas, me dan servicio, aunque sean piezas raras.

 

¿Cómo ha visto la evolución de AENIB desde que eres socio?

Creo que Marga (Dahlberg) ha hecho mucho y muy buen trabajo. Creo que los cambios que se han producido y las metas que se han alcanzado han sido positivas. El problema es que como cada 4 años se cambia el gobierno, la asociación casi ha de empezar de cero su trabajo con las administraciones.