09/05/2015
Palma, capital mediterránea de la náutica
El Palma Boat Show se está consolidando como uno de los salones náuticos a tener en cuenta a nivel europeo. Durante los 5 días que ha durado ha recibido la visita de más de 40.000 personas, superando las espectativas de los propios organizadores. El volumen de negocio estimado que generará también será positivo, en opinión de los propios expositores. El contento general que ha cosechado entre las empresas y profesionales participantes es tal que un 75% de ellos ya ha reservado espacio para la siguiente edición.
Este año han sido cerca de 3.000 marcas repartidas en 207 stands (con una larga lista de espera detrás) y un total de 180 embarcaciones, de las cuales 70 eran megayates de gran eslora. Todo un éxito, más cuando hace tan sólo 4 años se dejó de celebrar debido a la falta de interés por exponer.
Desde la organización del Palma Superyacht Show también han valorado esta edición. Jane Thompson, una de sus organizadoras, ha asegurado que ha habido más público y, lo que es más importante, de “una calidad superior”. Y es que una gran mayoría de expositores y brokers consideran que este año “la feria ha estado más profesionalizada y la han visitado más compradores potenciales”.
¿Cómo se ha producido un cambio tan radical en tan poco tiempo? Influyen varios factores a la hora de responder. Por un lado, obviamente, la crisis económica. El cliente de poder adquisitivo medio y medio-bajo (el grueso del sector) ha aguantado estos años con lo que tenía, parcheando su equipo y haciendo que durara todo lo posible. Este año, según los expositores con los que hemos hablado, se están empezando a plantear en serio actualizarlo. Las empresas coinciden en que el mercado español está despertando.
Por otro lado la organización del Salón ha aplicado un concepto básico de marketing: escuchar a su público objetivo (empresas expositoras) e implementar los cambios necesarios para lograr su objetivo. En 2012 la Asociación de Empresas Náuticas de las Islas Baleares (AENIB) se opuso a seguir con un modelo de Salón caduco y poco o nada rentable. Meses después presentó un proyecto ante el Comité Organizador del Salón que recogía las propuestas de un gran número de empresas del sector. Ese informe presentado por AENIB se convirtió en el esqueleto del nuevo modelo de éxito del Salón. Hecho por y para las empresas, pero centrándose también en los propios clientes. Desde la patronal náutica destacan que el crecimiento futuro del salón pasa por mantenerese fiel a esos principios, a que el Comité Organizador siga siendo el órgano decisivo en cuanto a control y estrategia y reinvertir los beneficios en el propio Salón para mejorarlo y poder dar cabida a nuestro patrimonio.
También hay que tener en cuenta que a nivel internacional Baleares vuelve a estar dentro del radar. España ha avanzado bastante en el camino hacia la armonización fiscal y administrativa con sus socios europeos, pero aún sigue muy lejos de Francia, Malta o Italia. El impuesto de matriculación, las elevadas tasas y los engorrosos trámites burocráticos tiran para atrás todavía a muchos clientes e impiden que el lucrativo turismo náutico se consolide. Sin embargo la actividad del chárter náutico ha crecido en los últimos años, impulsada también desde hace poco por la exención del Impuesto de matriculación.
Si bien es cierto que el Palma Boat Show todavía tiene algunos fallos (sobretodo en temas de organización y promoción local) se puede decir que están logrando su objetivo. Estas últimas ediciones los beneficios que da el Salón se invierten en mejorarlo, no en sufragar las pérdidas de otros eventos y ferias como se hacía antes. De cara a la edición del año que viene AENIB ha animado a la organización a incluir varios sectores como el de la vela ligera o el del buceo, que no han tenido mucha cabida en esta edición. También han sugerido que se lleven a cabo más actividades acuáticas y se valore la posibilidad de realizar visitas guiadas con escuelas o institutos para fomentar el cultura náutica entre nuestros jóvenes.
De cara a la edición de 2016 sólo podemos especular, pero la actual evolución tanto del sector como del propio salón hacen presagiar que podría llegar a romper todos sus anteriores records. La organización por el momento ya ha dado a conocer cuáles serán sus fechas: del 28 de abril al 2 de mayo de 2016. Además han anunciado que será presentada oficialmente en Mónaco y Cannes el próximo mes de septiembre. Una iniciativa que ha sido bienvenida por las empresas del sector a la vez que estas por su parte parte piden a los organizadores que dediquen mayores esfuerzos a captar clientes de calidad.
Este año han sido cerca de 3.000 marcas repartidas en 207 stands (con una larga lista de espera detrás) y un total de 180 embarcaciones, de las cuales 70 eran megayates de gran eslora. Todo un éxito, más cuando hace tan sólo 4 años se dejó de celebrar debido a la falta de interés por exponer.
Desde la organización del Palma Superyacht Show también han valorado esta edición. Jane Thompson, una de sus organizadoras, ha asegurado que ha habido más público y, lo que es más importante, de “una calidad superior”. Y es que una gran mayoría de expositores y brokers consideran que este año “la feria ha estado más profesionalizada y la han visitado más compradores potenciales”.
¿Cómo se ha producido un cambio tan radical en tan poco tiempo? Influyen varios factores a la hora de responder. Por un lado, obviamente, la crisis económica. El cliente de poder adquisitivo medio y medio-bajo (el grueso del sector) ha aguantado estos años con lo que tenía, parcheando su equipo y haciendo que durara todo lo posible. Este año, según los expositores con los que hemos hablado, se están empezando a plantear en serio actualizarlo. Las empresas coinciden en que el mercado español está despertando.
Por otro lado la organización del Salón ha aplicado un concepto básico de marketing: escuchar a su público objetivo (empresas expositoras) e implementar los cambios necesarios para lograr su objetivo. En 2012 la Asociación de Empresas Náuticas de las Islas Baleares (AENIB) se opuso a seguir con un modelo de Salón caduco y poco o nada rentable. Meses después presentó un proyecto ante el Comité Organizador del Salón que recogía las propuestas de un gran número de empresas del sector. Ese informe presentado por AENIB se convirtió en el esqueleto del nuevo modelo de éxito del Salón. Hecho por y para las empresas, pero centrándose también en los propios clientes. Desde la patronal náutica destacan que el crecimiento futuro del salón pasa por mantenerese fiel a esos principios, a que el Comité Organizador siga siendo el órgano decisivo en cuanto a control y estrategia y reinvertir los beneficios en el propio Salón para mejorarlo y poder dar cabida a nuestro patrimonio.
También hay que tener en cuenta que a nivel internacional Baleares vuelve a estar dentro del radar. España ha avanzado bastante en el camino hacia la armonización fiscal y administrativa con sus socios europeos, pero aún sigue muy lejos de Francia, Malta o Italia. El impuesto de matriculación, las elevadas tasas y los engorrosos trámites burocráticos tiran para atrás todavía a muchos clientes e impiden que el lucrativo turismo náutico se consolide. Sin embargo la actividad del chárter náutico ha crecido en los últimos años, impulsada también desde hace poco por la exención del Impuesto de matriculación.
Si bien es cierto que el Palma Boat Show todavía tiene algunos fallos (sobretodo en temas de organización y promoción local) se puede decir que están logrando su objetivo. Estas últimas ediciones los beneficios que da el Salón se invierten en mejorarlo, no en sufragar las pérdidas de otros eventos y ferias como se hacía antes. De cara a la edición del año que viene AENIB ha animado a la organización a incluir varios sectores como el de la vela ligera o el del buceo, que no han tenido mucha cabida en esta edición. También han sugerido que se lleven a cabo más actividades acuáticas y se valore la posibilidad de realizar visitas guiadas con escuelas o institutos para fomentar el cultura náutica entre nuestros jóvenes.
De cara a la edición de 2016 sólo podemos especular, pero la actual evolución tanto del sector como del propio salón hacen presagiar que podría llegar a romper todos sus anteriores records. La organización por el momento ya ha dado a conocer cuáles serán sus fechas: del 28 de abril al 2 de mayo de 2016. Además han anunciado que será presentada oficialmente en Mónaco y Cannes el próximo mes de septiembre. Una iniciativa que ha sido bienvenida por las empresas del sector a la vez que estas por su parte parte piden a los organizadores que dediquen mayores esfuerzos a captar clientes de calidad.